La Operación de próstata con láser verde, es un tipo de cirugía mínimamente invasiva y que supone una solución excelente para patologías como la hiperplasia benigna de próstata, común en hombres a partir de los 45-50 años.
En el Hospital La Zarzuela, realizamos este procedimiento desde hace más de 10 años , y está especialmente recomendado para aquellos pacientes que sufren de un aumento del tamaño de la próstata.
Para conocer el tamaño de la próstata, en la revisión médica con tu urólogo, te pedirá una ecografía prostática que después revisará y te indicará el tamaño y la cirugía más indicada. Porque en función del tamaño de la próstata, se puede aplicar una técnica u otra.
El láser verde, o Green Light XPS, es un método quirúrgico para tratar la hiperplasia benigna de próstata.
La operación de próstata con láser verde se realiza introduciendo un cistoscopio a través de la uretra, lo que reduce al mínimo la invasividad de este tipo de intervención, y elimina el tejido sobrante sin ocasionar ningún tipo de daño a tejidos sanos.
A esta técnica se la denomina fotovaporización prostática porque al aplicar energía térmica sobre el tejido benigno que ha ido creciendo con los años lo vaporiza, coagulando a su vez los vasos sanguíneos que podrían ir sangrando con otras técnicas.
La fotovaporización prostática con láser verde se recomienda en hombres que refieren síntomas de crecimiento de la próstata y ésta tiene un tamaño mayor a 80cc.
Esta técnica de operación de próstata no corta el tejido adenomatoso benigno, sino que lo vaporiza. De ahí que el láser verde en urología sea sinónimo de mínima invasividad, y que sus resultados sean percibidos de inmediato por el paciente de HBP.
La operación de próstata con láser verde es un procedimiento endoscópico que no requiere de incisiones. Se realiza a través de la uretra del paciente, con sedación profunda o anestesia, e introduciendo en ella un cistoscopio que es el que permite trabajar al equipo quirúrgico.
El Green Light XPS aplica un láser con un espectro de 532 nm que convierte el tejido prostático sobrante en vapor de agua (de ahí que a este procedimiento se le conozca también como fotovaporización prostática) para después retirarlo mediante la irrigación de suero fisiológico.
A la vez, el láser va fotocoagulando todo los vasos que normalmente sangrarían durante un procedimiento de esta naturaleza, lo que permite un trabajo más limpio y seguro, así como una mejor recuperación.
Además de los beneficios de la operación de próstata con láser verde que ya hemos visto, si se la compara con otros tipos de cirugías de próstata, como la cirugía abierta de próstata o RTU, aún resulta más positiva si cabe:
El postoperatorio de la operación de próstata con láser verde es muy llevadero. Apenas hay riesgo de sangrado, por lo que el paciente suele ser dado de alta el mismo día de la intervención.
Por lo demás, aunque hay que mantener una serie de cuidados, se puede retomar la actividad habitual en apenas 48 horas siempre y cuando no se realicen esfuerzos.
El láser verde ha demostrado una alta fiabilidad, sin embargo:
Ante cualquier síntoma, debe acudir a una consulta médica para que el equipo de urólogos le pueda informar.
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